Excel para niños

¿Por qué enseñar Excel a los niños? Todos los beneficios

Seguro que tus hijos se manejan como nadie en YouTube, Instagram y en todo tipo de juegos, pero ¿pueden decir lo mismo de Excel? De su generación habrás oído decir que son nativos digitales, que estamos ante las generaciones mejor preparadas y formadas de la historia, cuando llega la hora de la verdad no todo el mundo sabe utilizar Excel. Por eso deberíamos enseñar Excel a los niños para que su formación digital sea completa, ya que en el futuro les será muy útil, y conviene aprender a manejar las hojas de cálculo cuanto antes.

Motivos para enseñar Excel a los niños

Cada vez son más los puestos de trabajo que nos exigen conocimientos de Excel. Está claro que a los 5, 8 o 10 años los niños no se van a poner a trabajar, pero igual que cada vez les hacemos que aprendan inglés antes, podemos enseñar Excel a los niños a partir de estas edades para que poco a poco se vayan familiarizando con este interesante programa de Microsoft Office. De esta forma, el día de mañana tendrán unos conocimientos y habilidades de Excel muy interesantes a la hora de buscar trabajo.

También hay que tener en cuenta que Excel es un programa muy fácil de utilizar, al que poco a poco le podemos ir añadiendo pruebas más complejas. No vamos a pedirle a un niño de 7 años que sepa utilizar las macros de Excel, pero sí que puede empezar a familiarizarse con el lenguaje y la sintaxis que se utiliza en Excel, con algunas funciones, etc. Poco a poco se irán familiarizando con la guía de Excel, hasta el punto en que no tardarán en alcanzar tu nivel o incluso superarte.

A largo plazo, enseñarles desde pequeños a manejar Excel también tiene sus ventajas. Para empezar, los niños aprenden mucho más rápido que los adultos, y eso ya es un plus. Por otra parte, vemos que si ya desde pequeños tienen una base para el manejo de Excel a medida que crezcan tendrán más facilidad para aprender funciones cada vez más complejas; y tener ese conocimiento también puede ser un estímulo para despertar sus ansias por saber más sobre Excel.

Otra de las razones para enseñar Excel a los niños es la opción de darles más autonomía, en especial cuando van llegando a ciertas edades. Por ejemplo, podemos aprovechar las plantillas de Excel para que empiecen a gestionarse su tiempo, su economía, etc. Así, si le das una paga semanal o mensual a tus hijos, gracias a Excel pueden saber lo que gastan, cuándo lo gastan, cómo lo hacen, etc., a la vez que encuentran pautas para ahorrar. Una forma más de seguir formándose como personas y de crecer.

Excel, un estímulo para los más pequeños

Excel nos puede ayudar a desarrollar la vertiente creativa de los niños. Hay que tener en cuenta que los más pequeños piensan mejor en un medio visual, y lo que hace Excel es proporcionar una serie de imágenes muy concretas que los niños pueden relacionar con el procesamiento de datos. Todos los gráficos y tablas de Excel te pueden ayudar a mejorar los procesos de pensamiento y creatividad de tus hijos.

Recuerda que tienes a tu disposición un montón de ejercicios para que los más pequeños se vayan familiarizando con uno de los programas más interesantes que nos ofrece el paquete de Office. Al enseñar Excel a los niños procura dejarles unos 5, 10 o 15 minutos después de la lección para que experimenten con las distintas funciones de Excel y que así se vayan familiarizando con ellas y asimilen lo que han aprendido. Esta es la mejor forma de tener una base sólida de conocimientos de Excel.